Ciruelos en flor
Hace un frío que pela.
Esta tarde el aire se nos quería llevar,
haciéndonos temer por los disfraces de mañana
pero la naturaleza no rebla.
Fiel a su costumbre,
nos sirve en bandeja la metáfora de lo que debe ser nuestra vida:
un renacer cada día.
Los flores de los ciruelos del jardín
anuncian que queda muy poco para una nueva primavera.